Por qué utilizar Lenguaje Hipnótico

Lenguaje hipnótico

¿En tu profesión ofreces productos o servicios? Realmente no tiene importancia a qué te dediques o qué ofrezcas, si tu meta es convertirte en ingresar en la clase más alta de profesionales, es decir, en un Experto, debes aprender a vender.

En cualquier ámbito de nuestra vida estamos en un proceso de negociación incesante, con nuestros amigos, hijos, padres, jefes, compañeros de trabajo. Cada detalle de la relación que tenemos con nuestro entorno está marcada por las negociaciones.

Por ejemplo, para lograr un equilibrio saludable en la educación que le damos a nuestros hijos, en algunos momentos debemos hacer concesiones para lograr algún objetivo, ahí lo tienes, ¡siempre estas negociando!, y por lo tanto, vendiendo.

Todos vendemos, tuitéalo.

Hay un factor genérico que aplica a cualquier tipo de negociación – o venta – que pretendas concretar: la comunicación, la forma en como transmites tus ideas y las sitúas de acuerdo a las necesidades de quien te compra, domina este factor y serás capaz de vender hielo en el ártico.

Existe un patrón de comunicación que se utiliza en el mundo del marketing y las ventas, es una herramienta infalible para  influir en tus interlocutores y yo voy a enseñarte a usarla para convertirte en un experto de las negociaciones.

Estos son los principios básicos para  aplicar el lenguaje hipnótico:

  • Utilización del Tú: la conversación debe dar protagonismo a tu interlocutor, siempre de la manera más casual y relajada, dirígete sin muchos formalismos y suprime tanto como puedas el “Yo” de tu discurso. Crear un entorno de confianza te hará mucho más persuasivo.
  • Construye confianza: comienza con las propuestas que van a ser aceptadas sin dudas por parte de quien te escucha, a medida que avanza la conversación puedes ir insertando los planteamientos que puedan resultar más complicados para asimilar.
  • Confirmaciones periódicas: durante tu discurso, realiza preguntas constantemente para confirmar que te mantienes en sintonía con tu audiencia, si pierden el hilo inmediatamente perderás su atención. Puedes usar preguntas como: ¿me siguen? o ¿estamos de acuerdo?
  • Todo a futuro: El pasado no nos sirve para influir, a las personas les gusta pensar en lo que viene, utiliza un lenguaje que los haga imaginar sobre los posibles resultados positivos que obtendrán si acceden a tu propuesta.
  • Metáforas/historias: incorpora en tu lenguaje algunas historias breves que consigan alguna empatía con quien te escucha, hacerlos sentir identificados con una situación en particular te ganara su atención por un buen rato. El storytelling convence más que los argumentos.

El lenguaje hipnótico debe crear emoción

Por ejemplo, si tu idea es vender un automóvil puedes empezar con los beneficios que obtiene quien lo posee, luego puedes añadir: Imagina que corres por la autopista a 120 km/h y se atraviesa un animal en tu camino, el sistema de frenos ABS y los airbags independientes en cada asiento salvarán tu vida y la de tu familia… En este caso lo que estás haciendo es conectar tu lenguaje con la emocionalidad de quien te compra, es sencillo, cualquier persona desea garantizar la seguridad de su familia. No vendes un coche, vendes seguridad.

El secreto está en la sugestión indirecta

Debes tener cuidado en no ser evidente en tu intención de influenciar a quien te escucha, las personas pueden reaccionar de manera sensible si resultamos muy invasivos en nuestro discurso.

El lenguaje hipnótico plantea una sugestión mucho más sutil, su objetivo es formular los planteamientos correctos para sembrar la idea en el subconsciente de quien te escucha.

A las personas les gusta pensar que no son influenciables, tu trabajo es irlos empujando hacia esa propuesta sin que se resistan, porque es irrechazable de buena que es.

Reenmarcar la necesidad hacia su beneficio

Jamás le digas a un graduado universitario que le vas a vender un postgrado que cuesta 20.000 €, en tus campañas; lo único que debes hacer es señalar las oportunidades de futuro económico que pueden tener el hecho de seguir un postgrado.

Reencuadre de contexto

Otras personas lo llaman alteración de contexto, básicamente el reencuadre es una sugestión que te va a permitir influenciar en los patrones de pensamiento de quien te escucha y direccionarlos hacia la obtención de su beneficio principal. Pero tendrás que averiguar cuál es.

Para acelerar el proceso es importante saber escuchar y hacerte una buena idea de cuáles son las preferencias de quien necesita lo que ofreces, el trabajo consiste en enfocar la perspectiva únicamente en el beneficio que el potencial busca, dejando a un lado los posibles factores que no influyan en su toma de decisión.

Puedes ampliar a fondo el tema de la influencia en este video:

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